martes, 30 de septiembre de 2014

VER CHAVÍN ANTES DE MORIR

Ayer nos llega la noticia de que Chavín está catalogado por CNN entre las cinco joyas turísticas que toda persona debe explorar antes de morir. Los famosos exploradores de las maravillas del mundo Tony Wheeler y Vince Michael, fueron quienes eligieron a nuestro complejo arqueológico.¿Las otras están en el Perú? Pues no. No se considera tampoco a Machu Picchu.
Aparte de lo simpático de la nota periodística, la información tiene mucho de verdad. Chavín es mucho más maravilla que Machu Picchu. No hay comparación. Es más maravilla no solo porque Chavín es dos mil años más antiguo que MachuPicchu, sino porque Chavín es un gran templo, el primer gran templo de la cultura andina; mientras que Machu Picchu es solo un balneario inca, muy bello eso sí, pues integra armoniosamente las construcciones andinas con el agreste entorno.


La grandeza de nuestro Chavín es al fin reconocida

¿Y por qué tampoco está Caral entre estas 5 joyas turísticas? Será porque pese a ser más antiguo que Chavín, su influencia fue sólo local, mientras que Chavín tuvo una influencia de mil años a nivel nacional. Con Chavín, señores, nace el Perú.
Recordemos los grandes aportes de Chavín a la formación de la cultura andina:
En RELIGIÓN: Al gran Dios Guari de Chavín, el dios civilizador, mal llamado Lanzón.
En PENSAMIENTO ANDINO: La reciprocidad, la redistribución y el comunitarismo.
En CONVIVENCIA: La institución del ayllu como forma de organización social.
En AGRICULTURA: El cultivo masivo de la papa y el maíz.
En INGENIERÍA: El uso de andenes, represas y canales de riego.
En TECNOLOGÍA: La difusión de la metalurgia y la cerámica. La domesticación de la llama.
En COMERCIO: la institución del trueque y de ferias agropecuarias.
En TRANSPORTE: El uso de inmensos rebaños de llamas para trasladar mercancías.
En ARTE: El Discurso, forma simbólica de escribir en piedra. Tal es la influencia de Chavín que Picasso llegó a decir: "Definitivamente, gran parte de mi obra está inspirada en el arte Chavín".


Pintura de Pablo Picasso, gran chavinófilo.

De modo que tenemos razones para sentirnos muy orgullosos de Chavín de Huántar. Vale la pena, volver a visitar Chavín antes de morir.

domingo, 21 de septiembre de 2014

UNA ACLARACIÓN NECESARIA

Con suma frecuencia nos atribuimos la potestad de modificar la historia tal vez por ignorancia, en beneficio personal o para satisfacer nuestro ego y enfrentar a nuestros fantasmas.
En el primer caso, tenemos como ejemplo la biografía de Pedro Pablo Atusparia que aparece en la popular página de internet wikipedia:
"Según el historiador Augusto Alba, Atusparia estudió en el colegio internado La Libertad de Huaraz, donde destacó académicamente. Debido a un incidente en el de clases y por no revelar los nombres de los que ocasionaron el problema, fue encerrado un día entero en una celda. Al poco tiempo abandonaba sus estudios regresando a Marian con sus padres."
Y lo peor es que indica como referencia la obra: "Atusparia y la revolución campesina de 1885". 
Esta es una mentira colosal. En primer lugar, Atusparia nunca pisó aula alguna, y menos del colegio De la Libertad. Y lo más grave es que en la obra de don Augusto Alba Herrera, nunca se afirma lo que menciona Wikipedia, página de internet que se caracteriza por ofrecer información no certificada. Revisen la biografía del líder entre las páginas 264 y 274 y no hallarán semejante mentira. Lo que dice es: "de su niñez y juventud se sabe poco, pasaría entre las chacras de Marián y la ciudad de Huaraz". Alba Herrera señala en esa obra que según el censo de 1876 (datos levantados 9 años antes de la revolución) en la provincia de Huaraz había cerca de 50 mil analfabetos y los letrados eran menos de 10 mil (Pág. 39).


En la efigie se representa a Atusparia con un papel en la mano derecha ¿?

Lo que es cierto es que Atusparia aprendió a firmar mientras estaba herido. Y eso consta en diferentes documentos.
Claro que sería muy elegante decir que estudió en La Libertad, pero no es cierto. En esa época ningún campesino podía terminar la primaria y mucho menos estudiar la secundaria. Esto, en vez de denigrarlo, enaltece aún más la figura del líder, quien fue un autodidacta, un respetado "maestro tintorero" y un luchador social cuya obra trasciende hasta nuestro tiempo.

El otro caso, es tergiversar la historia según nuestra conveniencia. Y el mejor ejemplo son esas tallas que adornan el monumento a Luzuriaga en la plaza de Huaraz. Allí se habla de una "Conferencia tripartita entre Luzuriaga, San Martín y Bolívar en Guayaquil". Algo que tampoco sucedió. 


La base del monumento tiene cuatro bellas tallas, pero...

En los delirios nacionalistas de cierto ex alcalde de nuestra provincia, se le ocurrió pagar por un tallado que en nada enaltece a Luzuriaga, pues todos sabemos que la Entrevista de Guayaquil entre Bolívar y San Martín fue un fracaso. Por el contrario, se soslaya que Luzuriaga fue el libertador de Guayaquil (noviembre de 1820) y por ende del Ecuador. Mucho después fue la entrevista en ese lugar entre los dos representantes de las dos corrientes libertadoras (junio 1822).
Finalmente, hay otro tipo de tergiversación histórica que obedece más a la inquina que ciertos pseudos "historiadores" tienen por ciertos personajes de nuestra historia. Los psicólogos nos podrían hablar de que existen fijaciones con la figura autoritaria paterna que las volcamos en personajes con los que los identificamos. 

sábado, 13 de septiembre de 2014

EL GRAN INCA ANCASHINO

Un día como hoy, en 1992 el historiador Franklin Pease García Irigoyen, hermano del recientemente desaparecido Henry Pease, publica un memorable libro: Curacas, reciprocidad y riqueza, fruto de sus investigaciones sobre nuestro glorioso pasado.
En ese texto, Pease recoge la narración del entierro de Paullo Inca, el inca ancashino, el huaracino.


Franklin Pease tiene obras de gran valor para nuestra historia

A propósito, así como nos hemos propuesto reivindicar el nombre del DIOS GUARI DE CHAVÍN, cuya imagen es vilipendiada cuando la llamamos despectivamente "lanzón", también estamos en la lucha de desterrar el baldón que pesa sobre el nombre de Paullo, a quien historiadores advenedizos gratuitamente le han endilgado el mote de traidor.
Le llaman así porque dizque no se alió a Manco Inca para expulsar a los españoles, y por el contrario, luchó contra él, derrotándolo en siete batallas. Ocultan así su aversión al único inca no cusqueño, hijo de Huayna Cápac y la curaca huaracina Añas Colque.
Tenemos que ubicarnos en el contexto de esa época y no juzgar con ojos modernos, circunstancias y usos del pasado. La actitud de Paullo se justifica pues él reclamó su legítimo derecho a ceñirse la Mascapaicha, el símbolo real inca, por ser hijo de Huayna Cápac. Todos sabemos que muertos éste inca y su sucesor elegido, Ninan Cuyochi, debido a la virhuela traída por los españoles; se desató la lucha por la sucesión entre Huáscar y Atahualpa. Ambos se reclamaban herederos de Huayna Cápac y desataron una cruenta guerra civil. La presencia circunstancial de los españoles motivó la muerte de ambos. Es en este contexto que Manco y Paullo, ambos muy jóvenes, entran en la linea de sucesión. 


Dibujo de Guamán Poma de Ayala

Manco fue amparado por Pizarro y Paullo por Almagro, y con él fue a buscar un nuevo Cusco al país de los Araucanos. Mientras Manco, ofendido al ver violadas a sus esposas por los españoles, se levanta contra ellos y los arrincona en Lima, Paullo se vestía de gloria derrotando en cinco batallas a araucanos y mapuches, demostrando ser un genio militar.
A su retorno al país, es que se enfrenta a Manco, lo vence, lo arrincona en Vilcabamba y se corona inca.
No seamos ilusos. Hay quien piensa peregrinamente que si Manco Inca expulsaba a los españoles en el cerco de Lima, se restituía el imperio y jamás iban a regresar los ibéricos. Eso es falso. La suerte del incario estaba ya echada, oleadas y oleadas de europeos vendrían en los siguientes años y habría sido imposible controlarlos. Se iniciaba así la primera globalización.


Paullo en un documento del siglo XVII

Durante quince años, Paullo Topa Inca se puso al frente de la nobleza cusqueña y supo defender a las panacas incas de la voracidad de los españoles. De genio militar, pasó a ser un hábil político, que captó la dimensión de los cambios políticos que se sucedían con una velocidad pasmosa en los azarosos años de mediados del siglo XVI.
Su muerte fue muy sentida y según la narración de Franklin Pease, para su entierro se revivió el ritual establecido por Pachacútec: mucha gente salió a la plaza de Huacaypata en el Cusco a llorar por el inca fallecido, luego surgieron de dos esquinas gente de guerra que entablaron una batalla ritual en la que vencieron los de Hanan Cusco sobre los de Lurin Cusco, y finalmente aparecieron muchas mujeres llevando sobre sus ropas vestimenta de varones con vistosos tocados y altas albardas que cantaban las glorias y grandezas de Paullo Topa Inca.
A ver si a un traidor se le entierra de esta forma. Habrase visto.



Pintura de Paullo Inca, al pie del Señor de los Temblores